El invierno regresó y hubo que desempolvar la ropa larga, que yo ya
había subido a la parte alta del armario. Nos reunimos Jesús, Buje y
yo mismo en Locademia a las 7:30 h para hacer puertos. La ruta fue
muy agradable, con visos de buen tiempo al principio. No sabíamos si
hacer el bucle completo Canencia-Morcuera por Rascafría o acortarlo
en alguna medida. Las nubes que se cernían sobre la sierra al llegar
a Canencia nos hicieron decidirnos por la versión conservadora,
volviendo sobre nuestros pasos para subir Morcuera también por la
cara sur.

Volvimos por el Cerro y el carril bici, en pelotón compacto y buena
charla. Cayeron algunas gotas dispersas, como premonición de lo que
iba a ser la tarde en Madrid, pero no se arrancó a llover. Llegamos
con algunos kilómetros menos de los previstos (En mi caso,
exactamente 144,5 kms), pero muy bien de hora, para hacer méritos en
casa, y con una media discreta, ni buena ni mala, en torno a 21
km/h. Sin cansancio.
Justo cuando entraba por la puerta de mi casa se empezaba a servir
la paella. Just in time. Sin amonestación alguna, listo y dispuesto
para la brevet de 400 del próximo sábado en Algete.